sábado, 1 de junio de 2013

¿Todavía quieres ser programador?

Hace cosa de un mes, estaba leyendo uno de mis blogs favoritos. Jeff Atwood es todo un elemento, una figura reconocida en la red. Y sin embargo, consiguió sorprenderme (otra vez). Y no es porque no sea un tema conocido y de candente actualidad. Me gustó su enfoque. Y es que como tantas otras ocasiones, Jeff daba en el clavo.

Yo, personalmente, me ocupo de recibir y guiar en su inicio a las nuevas incorporaciones que suelen llegar a mi oficina. Es algo esporádico, y que no suele gustar a mis compañeros. Bueno, en nuestro entorno, es difícil encontrar a gente que en general les guste hablar en público. Pero sigamos. A esas nuevas incorporaciones, les trato de contar brevemente lo que pueden necesitar, sobre la empresa y nuestro sector. Pero también me encuentro muchas veces (y no sólo en mi empresa actual, sino más bien en todas), programadores que no tienen claro cuál es su futuro.

Normalmente, todos tienen claro que quieren más en su futuro laboral: más dinero, más categoría profesional...Pero no tienen claro cómo es el negocio del desarrollo de software y la programación, y por tanto, tienen dudas. El mundo del cine, prensa y televisión nos vende como un negocio lleno de oportunidades, con gran cantidad de puestos de trabajo, y porqué no...¡guay!

Pero los jóvenes que llegan a trabajar recién licenciados, empiezan una carrera como informática, o incluso otras diferentes como matemáticas o físicas. Y me da la sensación de que no tienen claro en qué se han metido. Y no me refiero a que sea malo. Simplemente, que al ser una profesión nueva y en constante evolución, creo que no hay información realista disponible sobre el sector, enfocada a los pre-universitarios. O incluso a los universitarios.

Normalmente, en este sector, los recién titulados empiezan programando. Simplemente porque hay mucha más oferta en programación en por ejemplo ... administración de sistemas o diseño de circuitos.

El problema, es que la programación no tiene porqué gustar a dichos recién titulados. Y se nota en las preguntas que hago del tipo:
  • ¿Sabes qué es un ciclo de vida?
  • ¿Has oido hablar de la ingeniería del software?
  • ¿Cuántos tipos de pruebas conoces?
  • ¿Has automatizado pruebas funcionales?
  • ¿Has programado en algún lenguaje?

Y por desgracia, las respuestas son decepcionantes. Y seguid sentados los que defendéis que tan sólo deben programar informáticos, y que el intrusismo por aquí, y que el resto no saben programar, y bla bla bla. Digo seguid sentados, porque las respuestas son igualmente decepcionantes para los que vienen de carreras como informática (técnica o superior). No digo que la universidad no sirva para nada. Digo simplemente, que hay una brecha significativa entre lo que prepara la universidad, y la realidad de las empresas y el mercado.

Y aquí es donde viene la pregunta. ¿De verdad te gusta programar? ¿Quieres ser programador? Porque te tiene que gustar. Porque lo tienes que disfrutar. Y porque de esa manera es como puedes mantenerte actualizado, y sobrevivir a proyecto tras proyecto (y empresa tras empresa).

Jeff Atwood va un poco más allá en su blog, y plantea una pregunta con trampa: "¿Todavía quieres ser programador?". Y es que Jeff plantea que por desgracia, hay que tener en cuenta que esta profesión, no todo el mundo es capaz de aguantarla toda su vida. ¿Quieres seguir siendo programador a los 30...40...50...60? Alguno comentará que no hay problema, que a los 2 o 3 años te hacen analista, y en otros tantos, jefe de proyecto. Sí...claro. Y yo soy Mickey Mouse.

En esta profesión, como en muchas otras, no todo el mundo puede ascender para siempre de forma continuada. La carrera profesional está ahí, pero cada 100 nuevos recién titulados no pueden ser mañana 100 jefes de proyecto. No es posible. Así que hay que prepararse en nuestro sector para una pregunta clave, que Jeff sabe plantear en su blog con acierto: "¿Todavía quieres ser programador?". Porque a cierta edad (no hablo de 40 o 50 años, sino mucho antes), la ganancia en productividad de la experiencia, se ve contrarrestada por otros factores. Y no nos engañemos, hay gente que simplemente, no tiene esa pasión y esas ganas de investigar y estar al día: volver de trabajar tras una jornada agotadora y ponerse a leer lo último (lenguaje, herramienta, metodología, etc.), probarlo, etc, etc.

Hay muchas posibilidades en nuestro sector, pero hay que saber moverse. Hay muchas posibilidades en las que aplicar nuestro conocimiento adquirido tras años y años programando, y disfrutando (o sufriendo) en múltiples proyectos y en múltiples empresas y clientes. Tanto si en el fondo no te gusta tanto programar como pensabas (o como decías), tanto como si llevas tanto programando que empiezas a estar ya saturado, existen opciones como:
  • Gestión.
  • Testing.
  • Calidad.
  • Analista
  • Analista funcional
  • Escritor técnico/documentación
  • Implantador de software.
  • Ventas
En muchos de estos roles, encontrar gente realmente conocedora de los entresijos de hacer software, es muy difícil. Así que ¿porqué no aprovechar tu experiencia y conocimientos adquiridos en algo más? ¿No es eso mejor que quedarse estancado en tu carrera, siguiendo con una programación que realmente nunca te gustó, o dejó de hacerlo hace mucho?

Y tú...¿todavía quieres ser programador?

6 comentarios:

  1. Seguiré siendo programador porque es mi pasión.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ese es el espíritu. Nunca dejes de luchar por lo que te gusta. Gracias por comentar, Efra

      Eliminar
  2. Bueno. Opino que no podemos ocultar que la programación tiene su grado de dificultad. Peeeero no es la única en su clase caballero. La medicina, finanzas, derecho, entre otras crees que son sencillas?? Toda carrera tiene sus pro y contraste, todas y esta no podía ser la excepción y considero que no son muy alentadoras tus palabras. Estoy de acuerdo que se debe saber bien lo que vas a estudiar y esta bien. Pero he sabido de muchas personas que se meten en carreras que creen que son fáciles y luego las veo con la mano en la cabeza. Creo que amar lo que haces es la clave y cuando lleguen momentos críticos enseñemos a pararse y sacudirse el polvo pero no a incidir que lo deje. Mi humilde opinión.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por leerme y comentar, Wellington. Pero no he querido hablar de la dificultad en la programación. Y tampoco hablo de que las carreras o titulaciones sean más o menos complejas. No es nueva la tasa tremenda de abandono que tiene esta profesión (y no suelen abandonar por falta de preparación). Precisamente lo que quería presentar son alternativas a todos esos grandes profesionales, que tal vez hayan perdido ese gusanillo inicial, o que las circunstancias del trabajo ya les impiden disfrutar como antes. Esto por desgracia, no lo he inventado yo. Pero sí hay oportunidades que presento para que un buen programador que ya no disfruta como al principio, que sigue siendo un profesional experimentado, use esa experiencia en redirigir su carrera ayudando en testing, calidad, etc. Como bien dices, esto no es LA UNICA SALIDA. Lo de pararse y sacudirse el polvo creo que merecería un artículo aparte (te debo uno sobre este punto). De todas formas, llevaba ya demasiados artículos positivos, y me apetecía algo más ácido, algo para pensar. Y el artículo de Jeff me ha permitido explorarlo

      Eliminar
  3. Los buenos programadores en Mexico debe ser analítico y frío ante situaciones críticas, es cierto. Pero eso no significa que no pueda ser apasionado, imaginativo y sentir curiosidad por diversos temas. De hecho, es la combinación de estas dos caras de la moneda la que puede hacerlo destacar entre los demás. El hecho de trabajar con código no significa que un programador de talento no pueda explorar las posibilidades que la tecnología puede ofrecer, tenga inquietud por aprender cosas nuevas, tenga dotes artísticas o ponga su imaginación al servicio de sus habilidades.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias por tu comentario. Efectivamente, tienes razón, hay que poner pasión en lo que se hace. Y fruto de esa pasión, me salió ese comentario. Aquí resalto que el mundo de la programación puede estar repleto de obstáculos, dificultades y problemas. Y me gustaría que los que vengan detrás de mí los conozcan. No sé si podrán evitarlos, no sé si podrán prevenirlos, pero a mí me hubiera gustado ese aviso, ese ánimo, ese brazo que me guiara en momentos oscuros. Mi esperanza está en que el lector responda al titular de esta entrada con un rotundo "sí". Pero eso, es algo que os dejaré a cada uno, eso sí, tras intentar daros un pequeño aviso o comentario en forma de entrada en mi blog.

      Eliminar